¿Poemas?
¿canciones? Poco importa el rótulo de estos textos escritos por
Lina Avellaneda, estos versos que tienen nostalgia –el relente de
días no olvidados-, pero también la decisión de seguir soñando un
futuro que ampare la vida herida en pedazos. Tiene una larga
trayectoria como cantora, se formó en armonía y composición
estudiando con Sebastián Piana, grabo casi una decena de discos, sus
poemas fueron musicalizados por Juan Falú, Virgilio Expósito,
Daniel Binelli y Antonio Tarragó Ros, entre otros. Hizo espectáculos
con Armando Tejada Gómez, Rubén Juárez, Antonio Agri y Raúl
Carnota, por mencionar sólo algunos compañeros de andanzas. Envió
a CALIBÁN estos versos que quizá mañana sean canciones, pero que
hoy pueden ser leídos como poemas.
PULSIÓN
De donde viene esta
pulsión insana
tan loca, tan raída, y
aun amada,
de seguir arrimándole la
ficha
al porvenir de todos o a
la nada.
Dónde quiere llegar su
desatino
porque riega de flores del
camino
si están volviendo a
pisotear la senda
diciendo que son cosas del
destino.
Estribillo
Y le pongo dos alas a la
infancia
allí donde más canta la
mirada
para volar con todos hacia
el sitio
donde están las razones
más amadas…
esta pulsión se llama
vida y tiene
raíz de hierro y porvenir
con alas.
Rompe la reja de mi boca a
fuerza
tuerce el candado de mis
manos buenas
ella acalla las dudas y
las penas
obscena se hace grande y
me doblega.
Bendigo esta pulsión que
me hace fuerte
aunque yo sea más frágil
que la muerte,
seguro la he heredado de
vos, vieja,
de vos, Graciela y de unos
ojos verdes.
GRACIELA
No sé bien
porque hoy me asaltaron las ganas
de salir a
pensarte, de acunar tu mirada,
de escribir
en el aire, de jugar en la nada,
de cantar con
las manos, de abrazarte en el alma.
De bailar en
el negro de tus ojos profundos,
de reír en
tu pelo generoso y oscuro
deshojar
margaritas, perseguir panaderos
y creer en
aquello de desear tres deseos
Ves hermana,
no lloro,
esta vez te
hago caso
la fuerza de
otros brazos
subliman
cualquier llanto
Como dijo el
poeta
en el mes de
los pájaros
un octubre te
fuiste
pero en
mí estás cantando.
AIRE
Por querer,
quiero el aire
porque
en él viajan voces
tiñendo de
colores
y amores el
paisaje.
Por querer,
quiero el aire
con el humo
celeste
dibujando
arabescos
de suspiros
de madre
Y si el aire
está limpio yo levanto mi vuelo
exhalando
deseos suicidados de tiempo
y si hay aire
viciado aun así me sustento
él me
empuja y me alienta a inventarme otro cielo
él se
atreve a cantarme y me salva de nuevo
Por querer,
quiero el aire
y lo quiero
hasta siempre
el vacío es
el sitio
donde mueren
los viajes.
Por querer,
quiero el aire
libre, eterno
en el tiempo
y es el aire
de todos
y por eso lo
quiero.
LO
SE TODO MI AMOR
Sé que la
luz de esa estrella
se apagó
hace tiempo,
y aunque
mire la luna
no
todo es tan bello.
Que el cielo
azul de esta noche
tiene nubes
negras,
si en la mesa
falta el pan,
sobra la
vergüenza.
Lo se
todo y más, mi amor
sé que
es cosa seria
que hay un
mundo en pañales
lleno de
miseria.
No hace falta
que lo digas
a mí
me estremece
y aunque
riego los gajos
no siempre
crecen.
Vengo del
puño cerrado
disparando
sueños
llevo la voz
en cuello
collar
eterno.
Se que algún
día vendrán
por cientos
de atajos
miles de
versos de amor
solo a
destajo.